Una huelga general social

Por Daniel Jiménez (@npositivas)


Pasado mañana tendrá lugar la huelga general convocada por los sindicatos contra la última reforma laboral del gobierno. Una protesta a la que el 15M ha anunciado que va a sumarse porque entiende que es necesario responder a esta nueva agresión contra los derechos laborales. Dicha postura está muy lejos de significar un apoyo a los sindicatos mayoritarios convocantes, a los que se critica duramente, principalmente por el papel de sus cúpulas, cada día más incapaces de plantar cara a una ola neoliberal que amenaza con tragarse a los acomodados dirigentes sindicales.

Sin embargo, las críticas al agostamiento de las cúpulas no han llevado al movimiento ciudadano a caer en el error de no secundar la huelga. En primer lugar, por el convencimiento de que hay que hacer frente a cualquier agresión contra los derechos, como es el caso de esta reforma laboral, que en el fondo no es más que un abaratamiento del despido.
En segundo lugar, las críticas a los sindicatos se deben a que la gente demanda sindicatos más combativos y representativos. Es decir, en ningún momento se cuestiona la existencia de estas organizaciones de representación colectiva. Todo lo contario, hay un consenso en que los sindicatos son necesarios, y en que estos deben ser mucho más capaces en la defensa de los derechos laborales. Esta postura poco tiene que ver con las soflamas antisindicalistas lanzadas por los sectores económicos y políticos favorables a la reforma laboral.

Nos encontramos así con una huelga general en la que, por primera vez en mucho tiempo, si no en toda la historia, los protagonistas no van ser solo los sindicatos y el gobierno. Esa ciudadanía crítica, que va a estar en la protesta, pero que se niega a ser palmera, sabe que tiene mucho que decir. Desde la unidad en los momentos clave, porque así lo requiere esta lucha, pero también desde la diversidad, como no podía ser menos cuando se trata de la rica variedad del 15M, ese movimiento de movimientos.

La página web tomalahuelga.net es una clara muestra de dicha riqueza. Allí se pueden conocer muchas de las diferentes iniciativas que se están preparando para el día 29 de marzo, siempre con la idea de reforzar la huelga. Destaca la propuesta de una huelga de consumo, que aboga por no comprar nada el día de la protesta y por consumir de forma responsable .También es muy interesante la iniciativa "29M, Huelga General Sin Miedo", donde es posible acceder a un listado de empresas que están intimidando a sus trabajadores para que estos renuncien a ejercer su derecho constitucional.

Estos son solo dos ejemplos de cómo una huelga general se convierte en una huelga social, la primera que se produce tras este estallido de conciencia colectiva que ha supuesto el 15M. Un proceso que va en aumento, y que ha sembrado en nuestras mentes y en nuestros corazones la demanda una nueva sociedad, más horizontal, justa, abierta e inclusiva. Esta sí que es una reforma necesaria.