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martes, 10 de abril de 2012

Otra economía es posible

Por Daniel Jiménez (@npositivas)


La foto seguro que ya la habéis visto. Pertenece a una campaña de Acción Contra el Hambre y ya la utilicé en un artículo en Noticias Positivas. Fue hecha para su difusión masiva con la finalidad de concienciar.



Ya son más de cuatro años los que llevo escribiendo sobre economía solidaria en Noticias Positivas. Tiempo en el que he podido hablar con muchas personas, conocer multitud de interesantes iniciativas y leer infinidad de libros e informes sobre diversos temas. Aunque todavía estoy muy lejos de ser un experto en la materia, sí que he llegado a ciertas conclusiones que me gustaría compartir.

La primera es que el sistema económico actual es altamente inestable. Su capacidad de adaptación brilla por su ausencia. El capitalismo neoliberal solo contempla dos opciones: o crece o se derrumba. Crecimiento que debe basarse en todo caso en un endeudamiento irracional, sobre el cual sostenemos un consumismo galopante que atenta contra la conservación de "nuestros recursos naturales, cada vez más sobreexplotados. Eso por no hablar del cambio climático, que no es más que otra consecuencia de las altas exigencias de consumo energético y de materiales de este modelo imposible.


Vivimos por tanto inmersos en una pérfida dinámica circular que se retroalimenta constantemente. El aumento del consumo incrementa la actividad económica, que a su vez incrementa el número de objetos y necesidades que debe reabsorber el consumo, apoyado siempre por la palanca del endeudamiento financiero para mantener la rueda en movimiento. Cuando la rueda se para, llega la catástrofe. Si baja el consumo, se deprime la actividad económica y por tanto se genera desempleo. Y si no trabajamos, somos más pobres y no podemos consumir, lo cual provoca que siga bajando todavía más el consumo.


Llegados a esta situación, nos plantamos ante un dilema que parece imposible: ¿crecimiento insostenible o miseria social? Digo bien, que "parece" imposible, porque al fin y al cabo, el crecimiento insostenible siempre acaba colapsando, sobre todo porque se basa en un endeudamiento igualmente insostenible. La actual crisis financiera es un claro ejemplo en este sentido. De modo que en realidad, estos dos caminos del capitalismo terminan por converger en uno solo.


Ante esta situación, solo cabe pensar en una redefinición de la economía para alcanzar un modelo verdaderamente estable que pueda garantizar la prosperidad de las personas sin poner en juego el planeta y sin arriesgarnos a nuevas crisis financieras. Ya hay autores que están imaginando cómo podrían ser estas alternativas, y que aseguran que no hablamos de utopías, sino de realidades que podemos poner en práctica.

En este sentido, recomiendo leer el libro "Prosperidad sin crecimiento" de Tim Jackson, que aborda todas estas cuestiones que estoy citando y que además ofrece interesantes salidas a los dilemas de la economía actual. Dilemas que jamás van a ser expresados por esos supuestos expertos en economía que suelen aparecer en las tertulias de radio y televisión, donde demuestran lo mucho que saben acerca de predecir el pasado. Cuando se aburran de ellos (no tardarán mucho) les recomiendo que abran este libro de Jackson. Verán como sí que es cierto eso de que y, por tanto, otro mundo, es posible.

6 comentarios:

  1. El siguiente paso para el avance de la Humanidad debería ser el de compartir los recursos adecuadamente para la prosperidad y el bienestar de TODOS, no para el de unos pocos a costa de todos y de destrozar el planeta.

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  2. llevo años diciendo que el cáncer de nuestra economía es la obsesión por el crecimiento. Leeré ese libro.

    Me alegro de que personas documentadas, leidas y escribanas lo compartan

    Buen post!

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  3. Lo malo es que este sistema que está montado aún interesa a los que más tienen.
    Para que unos pocos vivan pero que muy bien, un montón de personas tiene que vivir mal.
    Así ha sido y así será desgraciadamente.

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  4. Interesante escrito, conciso y lleno de verdad. Ciertamente el sistema capitalista rapaz e insaciable que padecemos la humanidad entera y todas las formas de vida del planeta, está llegando a un punto extremo. Es necesario encontrar un punto de quiebre en la evolución histórica de nuestras sociedades: racionalidad en lo económico y solidaridad en lo social. Saludos desde México.

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  5. Necesitamos una economía sostenible, que entienda que los recursos son finitos y que tenga en cuenta a las personas.
    Gracias a todos por los comentarios!

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  6. Con gusto muchos haríamos sacrificios para ayudar a esos niños de la foto y otras personas en situaciones tan precsarias, pero lamentablemente nos los imponen para enriquecer más a los pocos que tienen ya de sobra. La mayoría de las personas queremos un mundo más justo, solidario y cabal. Se puede conseguir, seguiremos peleando para ello. Enhorabuena por tu blog.

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