En la cumbre de Copenhague sobre el clima celebrada el pasado mes de Diciembre, los países asistentes tan solo firmaron una declaración de intenciones sobre la cantidad de carbono que pretenden reducir en sus emisiones para el año 2020. No obstante, antes del próximo 31 de enero, deberán haber concretado sus propósitos..
En concreto en Europa, parecemos debatirnos entre reducir el carbono que emitimos a la atmósfera entre un 20 y un 30% respecto a los niveles de 1990, aunque esta cifra vendrá en parte determinada por el compromiso que asuman el resto de países y “solo se llevará a cabo si asumen unos esfuerzos comparables”. Así lo ha asegurado, la secretaria de Estado de Cambio Climático, Teresa Ribera, tras presidir el consejo informal de ministros de Medio Ambiente de la UE en Sevilla que ha explicado el problema que supone no haber concretado el término"comparabilidad", que puede interpretarse como esfuerzo equitativo o esfuerzo dentro de la capacidad de cada país.
En cualquier caso, a pesar de lo que se decida fuera de Europa, parece que dentro tampoco somos capaces de alcanzar un consenso y es que, España, Reino Unido, Alemania y Francia están a favor de asumir un compromiso del 30%, mientras que por ejemplo en Italia, la ministra de Medio Ambiente ha llegado a tildar de “surrealista” plantear reducciones de un 30%, tras el fracaso de la cumbre de Cophenague.
En lo que parece que si hemos llegado a un acuerdo los 27, es en el lugar en el que se deben realizar las negociaciones. Jonathan Pershing, representante de EEUU en Copenhague, ha abogado por que las negociaciones se lleven a cabo tan solo entre los países más contaminantes, pero Teresa Ribera ha asegurado que "desde Europa, el sentimiento más claro es que el lugar donde se deben realizar estos grandes procesos de negociación es Naciones Unidas", que es "el único foro de alcance global".
Fuente: El Mundo
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