martes, 20 de septiembre de 2011

¿Sirve de algo movilizarse?

Ando enredada en los preparativos de Moving Planet. Todo un colectivo de ONGs y asociaciones estamos apoyando la campaña internacional 350.org para que el próximo sábado 24 de septiembre se oiga bien fuerte que la sociedad se preocupa por el medio ambiente. Una vez más tratar de llegar a la gente y movilizar al mayor número de personas posibles para que la lucha llegue un poco más lejos.

Da la impresión que estamos empezando a creer de nuevo en el poder de las personas y nos estamos dando cuenta de que juntos podemos hacer grandes cosas. Últimamente parece haberse despertado la fuerza de la movilización ciudadana. Un claro ejemplo ha sido el 15M, que ha conseguido movilizar a miles de personas de forma espontánea y horizontal para pedir un cambio en el sistema.

Son muchas las iniciativas y algunas con una acogida impresionante pero… ¿realmente sirven para algo? Esta es una pregunta inevitable ¿merecen la pena todo el esfuerzo y la dedicación? ¿Llega a alguna parte?
A esto se suma que sin duda nuestro entorno a veces resulta desmotivante, plagado de casos donde los intereses de unos pocos priman sobre los del resto.

Aún así siempre hay algo que te devuelve la ilusión, te das cuenta que, aunque es un  esfuerzo individual, somos muchos individuos persiguiendo el mismo fin y da como resultado un gran colectivo que quiere cambiar las cosas. Y no hay nada mas reconfortante que sentirse arropado por esas personas que, pese a no conocerse entre sí comparten esperanza y objetivos con la certeza de que entre todos se puede construir, sin prisa pero sin pausa.

Y hay grandes ejemplos de éxito. Greenpeace que la semana pasada cumplía 40 años, consiguió con su campaña “Kit Kat” que Nestle cambiase su proveedor de aceite de palma porque estaban deforestando la selva de Indonesia; o su última acción “Detox” que ha hecho que Nike, Adidas y Puma se comprometan a no contaminar el agua vertiendo tóxicos procedentes de toda su cadena de producción. Otro buen ejemplo lo protagoniza Francisco Polo, director de la organización Actuable que hoy cumple un año, que inició un movimiento con el que consiguió que España firmase el tratado contra las bombas de racimo.

Metida en harina pienso que si de cien acciones una sirve de algo, ya es un logro, es una esperanza para seguir luchando. Además el resto no son batallas perdidas, puede que no tengan reacciones inmediatas, o no haya una respuesta política, pero son semillas, semillas para el cambioAsí que les dejo con esta reflexión invitándoles a que, como yo, no se dejen intimidar por el sistema y luchen, con alegría, convicción, o en bicicleta como lo haré el próximo sábado, por aquello que consideren importante.

Lucía Zuloaga de UniversoVivo

3 comentarios:

  1. Pues mi enhorabuena! No sabía lo de la campaña de Greenpeace pero esto nos ayuda a seguir pensando en positivo. Por cierto, me apunto a 350.org. Dónde hay más info?

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  2. Buen trabajo !
    Cualquier acción positiva para el cambio merece la pena y cada vez estamos más cerca.

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  3. Muchas gracias por el apoyo!!!
    Seguimos luchando, porque sí merece la pena.

    Bea, puedes encontrar más info en: http://movingplanetmadrid.org/

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