Contamos con más de 400.000 pozos petrolíferos abandonados en todo el mundo que podríamos convertir en centrales hidroeléctricas con agua de mar, si colocásemos en su interior una turbina y dejásemos caer el agua hasta dónde antaño estuvo la balsa de petróleo. La única particularidad de este sistema sería que al ser pozos impermeables, una vez llenos habría que sacar la turbina y colocarla en otro yacimiento. "La idea es tan simple que resulta absurda", ha reconocido el novelista Alberto Vázquez-Figueroa, autor de esta nueva idea que podría generar un 20% extra de energía limpia.
Hasta el momento, la idea del novelista ha acaparado el interés de diversas empresas españolas cómo FCC y BBVA así como también de los ministerios españoles de Industria y Exteriores que pretenden reunir a Vázquez-Figueroa y a sus técnicos para evaluar las posibilidades reales de la idea.
Este sistema nos permitiría reutilizar viejos yacimientos en desuso y “generar más electricidad que con 200 centrales nucleares”, según ha explicado a El Mundo el novelista, con la ventaja de que no se generarían residuos peligrosos ni gases de efecto invernadero. Pero parece que no hay una posición única frente a la patente de Figueroa y es que algunos expertos dudan del potencial que tendría esta nueva tecnología. Por su parte, Carlos Soler Liceras, ingeniero de caminos y preofesor de obras Hidraúlicas de la Escuela de Ingenieros de Obras Públicas de la Universidad de La Laguna que cree que “ el rendimiento de la energía hidroeléctrica es el más alto de todas las fuentes actuales y ronda el 90%". Soler Liceras asegura que es muy sencillo hacer cálculos y que tan solo “hay que obtener el volumen total de barriles de crudo que se han extraído hasta la fecha y dividirlo por dos. Ese es el volumen de agua que se podría turbinar a una altura media de 1.000 metros de profundidad. Se trata de una cantidad de energía enorme".
"El espacio es enorme, el mar es infinito y la altura es muy grande. Aprovechemos la oportunidad para producir energía limpia", Alberto Vázquez-Figueroa.
En Universo Vivo nos alegramos de que hay gente que siga luchando por rediseñar las cosas y buscar un modelo más sostenible. Si la idea de Vázquez-Figueroa sigue adelante, podremos reutilizar viejos pozos para generar energía limpia y evitar más emisiones de Co2 a la atmósfera. "Felicidades por la innovadora idea".
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