Ecología Doméstica: Limpiar sin contaminar

El aire que respiramos en nuestros hogares está contaminado. Los productos de limpieza que se comercializan contienen químicos que van a parar a nuestra sangre. Algunas de estas sustancias son muy nocivas para la salud, especialmente para la de los niños. Estudios realizados demuestran la influencia de estos productos en el desarrollo del cáncer, de alergias y de enfermedades respiratorias como el asma.

Estos productos también se van por el desagüe cada vez que realizamos la limpieza del hogar. Estas aguas son depuradas en las plantas de tratamiento, pero estos químicos nunca se desintegran totalmente y finalmente terminan en los ríos y en el mar, entrando de nuevo en el ciclo biológico y en los alimentos que después consumimos.

La asociación francesa Salud y Medioambiente (Asef) ha publicado una pequeña guía titulada “Guía verde de las tareas domésticas” (en francés) que aporta consejos simples basados en estudios científicos recientes.  Fuente: ladyverd.com

Es posible cambiar nuestros hábitos reemplazando los productos nocivos por otros que respeten el medio ambiente y la salud. En este artículo os ofrecemos una serie de trucos y enlaces en los que os recomendamos sustitutos naturales e igualmente eficaces para la limpieza del hogar. 

PRODUCTOS DE LIMPIEZA CASEROS Y ECONÓMICOS
En la limpieza ecológica se recomienda utilizar productos biodegradables que se evaporan en muy poco tiempo. Estos productos se pueden adquirir en tiendas especializadas (herboristerías y tiendas ecológicas), pero también podemos fabricar nuestros propios productos de limpieza. Con este cambio evitaremos arrojar al desagüe multitud de sustancias químicas peligrosas con lo que contribuiremos a cuidar el medioambiente pero además, usar estos productos no contaminantes nos va a resultar muy económico y saludable

1. El bicarbonato es el producto estrella de la limpieza ecológica. Además de ser un buen desatascador, es muy efectivo para limpiar superficies con suciedad incrustada y, entre otras cualidades, no raya el acero inoxidable. Un buen acompañamiento para el bicarbonato es la sal, muy útil para absorber la grasa de las sartenes y facilitar la limpieza de las mismas.
2. Para desatascar, se puede verter por el desagüe un cuarto de taza de bicarbonato de sodio seguido de media taza de vinagre. Dejarlo tapado quince minutos para luego dejar correr agua caliente en abundancia.
3. Para los azulejos, manchas en alfombras y puertas del horno también es útil el bicarbonato de sodio, dejándolo actuar de 15 a 20 minutos.
4. Otro producto natural muy utilizado es el vinagre: diluido en el agua puede servir para fregar suelos ya quees muy eficaz como desinfectante.  Si añades vinagre al agua en que lavas los platos, ahorrarás detergente y obtendrás más brillo.
5. Para limpiar los muebles, se puede quitar el polvo con un paño humedecido. Para limpiar más a fondo usa una mezcla de dos partes de aceite de oliva y una de vinagre. 
6. Un sustituto para el limpia cristales es utilizar un periódico mojado y otro seco. También sirve mezclar agua con dos cucharadas de alcohol de quemar. Otro limpiacristales muy efectivo es una mezcla de una taza de agua, una taza de alcohol de farmacia y una cucharada sopera de vinagre. Se mezcla todo ello en una botella provista de un difusor y tenemos un limpiacristales efectivo e inocuo por un precio muy inferior a los productos similares que encontramos en el supermercado. El zumo de limón o el concentrado de limón también se puede utilizar con una bayeta para limpiar los cristales. 
7. Para los plástico se emplea un algodón mojado en alcohol de quemar. 
8. En cuanto a los productos antibacterianos, una buena alternativa son el vinagre y el alcohol de farmacia. Este último, debido a su rápida evaporación, resulta muy adecuado en hogares donde hay niños o animales de compañía.

Puedes encontrar mucha más información en este blog. En él te enseñan como fabricar cualquier producto de limpieza que necesites a partir de ingredientes naturales.

OTROS CONSEJOS ÚTILES PARA EL HOGAR

1. Todos los días abre las ventanas para ventilar todas las estancias del hogar.
2. Sustituye los ambientadores por plantas aromáticas o esencias naturales.  Mezcla agua con esencia de cedro, clavo, etc. 
3. Ahorra en el consumo de agua: No dejes correr el agua. 
4. Pídele ayuda a la naturaleza. Las plantas de interiores pueden reducir las toxinas de tu hogar. En particular, las plantas Cinta (Cleome hassleriana) y la Hiedra Común (Hedera helix), que son ideales para absorber el formaldehído. También, la Boston fern (Nephrolepis exaltata) y la planta de caucho.

Si a pesar de todo prefieres seguir utilizando productos químicos, la única ventaja es que son más cómodos de usar, procura que sean ecológicos. Usa preferiblemente jabón en polvo, rallado o en escamas y, si tiene que usar detergentes, que sean biodegradables y sin fosfatos. Aun siendo ecológicos es importante emplear la mínima dosis. Puedes encontrar más consejos a este respecto en este blog.

Recuerda, usar adecuadamente productos químicos, o mucho mejor, no usarlos es importante para tu salud, tu bolsillo y tu planeta.